La importancia de las materias primas en la fabricación de envases sostenibles
En Pack Away tenemos el compromiso de intentar mitigar al máximo posible el impacto medioambiental, buscando alternativas sostenibles en nuestro proceso de producción y en las materias primas con las que están fabricados nuestros envases. Los envases ecológicos y sostenibles, como bien hemos destacado, se han convertido en una solución cada vez más popular para reducir el impacto medioambiental y hacer que los productos sean más sostenibles y respetuosos con el planeta.
Si quieres conocer algunos de los materiales con una componente ecológica y sostenible claves en la fabricación de envases, sigue leyendo.
La hoja de palma
Se trata de una de las materias primas más populares en la elaboración de envases sostenibles. Una de las características principales y más útiles en el ámbito que nos concierne es su gran resistencia a las altas temperaturas, perfecta para el microondas y el horno. Esta característica también la hace perfecta para el transporte de alimentos y bebidas calientes. También es fácilmente moldeable, lo que permite su adaptación según las necesidades específicas de los alimentos.
Con un sabor neutro y resistente a la humedad y al aceite, la hoja de palma es una excelente opción para la producción de envases para el sector de la alimentación.
La caña de azúcar
Los envases creados con la caña de azúcar resultan ser de los más resistentes y con muy buenas propiedades térmicas, ya que pueden llegar a soportar temperaturas de entre los -10ºC y los 120ºC. Este factor hace que sean perfectos para contener tanto platos fríos (como sushi o ensaladas) como platos calientes (pasta o arroces). Su apariencia estética es elegante, por lo que es perfecto para el take away y delivery de todo tipo de platos.
Además de no generar emisiones, absorbe el CO2 de la atmósfera durante su crecimiento, reduciendo así el dióxido de carbono en el aire. Son la materia prima perfecta para fabricar envases de un solo uso, ya que reducen la huella de carbono respecto a aquellos derivados del petróleo.
La madera
Se usa mayoritariamente para la fabricación de artículos como cubiertos y agitadores. Existen diversos tipos de cubiertos de madera, aunque lo más común es usar la madera de abedul, ya que puede moldearse fácilmente.
Sus ventajas son numerosas, siendo la principal que no dañan el medioambiente. Además de que no dañan el menaje de la cocina, no reaccionan a ingredientes ácidos como el tomate, son resistentes al calor y además son reutilizables.
La celulosa
Se trata de una materia prima pura y sostenible, respetuosa con el medio ambiente. Un factor muy importante es que existen árboles especialmente cultivados para la producción de celulosa, por lo que no se talan árboles innecesariamente.
Una de las características más notables de la celulosa es su capacidad para crear una barrera contra la humedad y los gases, además de su resistencia, durabilidad y maleabilidad. La celulosa es biodegradable y compostable, por lo que al descomponerse de manera natural no causa daño al medio ambiente.
El bambú
Flexible, resistente y ligero, el bambú se adapta fácilmente al medio en el que se encuentre y crece más rápido que cualquier otro árbol. Para ello no necesita ni fertilizantes ni pesticidas. Produce una gran cantidad de oxígeno, y al tener un crecimiento tan veloz, se convierte en un material rápidamente renovable y ecológico. Es increíblemente versátil, ya que es fácilmente moldeable y puede ser cortado y pulido en diferentes formas, tamaños y adaptarse a las necesidades específicas de los productos.
Hay muchas variedades de bambú, aunque la más ecológica es el bambú Moso, una variedad que tiene un crecimiento más rápido, por lo que la plantación se mantiene constante y sana en todo momento.